12 julio 2017

Construcciones extrañas

“Casa es casa, aunque en la punta del cerro”, afirman las personas en nuestro medio, lo que no dicen qué tipo de casa quieren, pues hay desde las más modestas hasta las más extravagantes en el mundo, manejando casi el mismo criterio.

Sin embargo, reconocer que en Bolivia como en otras regiones el contar con una casa está al alcance de pocas personas, virtualmente es privilegio de algunos y no todos pueden cumplir con el sueño de tener una vivienda y si lo tiene tendrá que pagar durante toda su vida laboral.

El termino casa está muy asociado al concepto de hogar, pero también con la territorialidad, estableciendo relaciones con el resto de la comunidad, aunque en esa estructura la casa aún se la concibe como una idea de poder.

En ese marco, las construcciones se pueden circunscribir en nuestra región muy posible a los tiwanacotas y recolectores, agricultores en las tierras orientales. La figura no es muy clara sobre el tema, debido a que no existen muchos modelos de casas que hayan dejado los antepasados, excepto por la arquitectura de Tihuanacu, que es la más reconocida, según los mismos arqueólogos y reconocida por la arquitectura boliviana, son pocas las estructuras que sobrevivieron al paso del tiempo.

La idea de la casa como sinónimo de propiedad privada o como sinónimo de poder social no ocurre de inmediato en las sociedades más antiguas, si no cuando los españoles colonizan la región andina, y vienen en busca de oro, que de hecho establecieron modelos de urbanidad y relaciones entre las pocas casas que aún están de pie, eso no quiere decir que los tiwanacotas no tuviesen un planificación territorial, ya lo habían hecho, al menos eso demuestra la ubicación de las construcciones de esta cultura milenaria.

Los materiales para las construcciones, fueron casi similares a otras sociedades en base a piedra y barro, madera en lugares cálidos hasta llegar al ladrillo, hormigón y mármol, hasta que el hombre dominó la técnica de edificar, dando a apertura a su creatividad y que la refleja en estas casas raras y extrañas en el mundo, que al parecer son simple apariencia, ya que los servicios comunes y habitaciones son las mismas que en cualquier construcción

Estos diseños impresionantes de arquitectura dejan pasmados a los que tienen un criterio convencional de casa, pues los diseños amorfos, figuras de animales o de terremoto, mostrando que la creatividad del ser humano no se detiene, buscando posiblemente ser muy “original”.

CONSTRUCCIÓN EXTRAÑA

Varias teorías se han escrito sobre las extrañas y enigmáticas construcciones de Tiahuanaco como afirmar que fue un centro religioso, que parece ser lo más próximo, debido a que sus edificaciones tan perfectas, además muestran la calidad del material que sigue en pie y que con el tiempo revelan nuevas estructuras, en un lugar inhóspito para su tiempo.

La dimensión y el volumen de los materiales, han provocado que incluso el escritor Erick Von Daniken, sostenga que es una obra de extraterrestres, explicación que le dió a las edificaciones de Tiwanaku, que se convierte en la más rara e insólita del mundo.

Ubicada a 3.840 metros de altitud, Tiahuanaco se extiende sobre unas 420 hectáreas, con vestigios megalíticos que cubren cerca de 16 hectáreas, está en discusión la data de esta construcción fantástica, pero también enigmática.

Algunos sostienen que fue “edificada por gigantes, en una sola noche, antes del Diluvio y que fue destruida por un enorme terremoto o por los rayos del Sol y parte de ellas se hundieron en Lago Titicaca, vestigios que se encuentran en el fondo. Es posible, ¿qué estos constructores hayan sido de mucha avanzada incluso para este tiempo?

Puma Punku (Puerta del Puma- en Q´eswa), es parte de las ruinas de Tihuanaco, y hay que aclarar que esta cultura es anterior a la Inca y Aymara, no dejaron un lenguaje escrito, solo perduran sus construcciones con un conjunto de bloques pétreos que encajan con gran precisión, aplicando ingeniería, arquitectura y mano de obra calificada seguramente y digna de admirar.

Otra particularidad es la sujeción de rocas con piezas de cobre vaciadas y otras, probablemente martilladas en frío hasta encajar en la unión de los bloques y algunos expertos suponen que las piedras fueron vaciadas.

Otros afirman que los bloques son de una piedra arenisca roja que era extraída de una cantera a 10 kilómetros de distancia. El otro tipo es la andesita ígnea, que se utilizaba para ornamentación y era extraída de una cantera a orillas del lago Titicaca a unos 90 kilómetros. Estas piedras se desplazaban en canoas y se arrastraron por tierra.

Estas paredes de piedra, enormes bloques, ¿porque tuvieron que ser tan voluminosas?, no está claro de las técnicas que se usaron para trabajar y mover estas piedras, pero esta dicho que los tiwanacotas fueron unos genios para hacer construcciones.



Enredo de cables provocan inseguridad

En algún momento el municipio advirtió del peligro de la gran cantidad de cables colgados entre un poste y otro en las calles de la ciudad paceña, sin embargo, las empresas que utilizan y suministran servicios mediante este material no se inmutan siquiera de mejorar este tipo de instalaciones, que por lo general son de servicios públicos.
En varias ocasiones los cables provocaron cortos circuitos en las calles, cedieron los postes por el peso de los cables, ni aun así ordenan el enredo que existe con los cables en calles del centro de la ciudad de La Paz y similar situación debe ocurrir en otras ciudades del país.

POR EL AIRE

Entre empresas telefónicas, de electricidad y otras se reparten el problema, pero que ninguna que invade el espacio aéreo toma la previsión del peligro que corren los ciudadanos por debajo de estas instalaciones, es más, si existe alguna regulación precisa, no la cumplen, similar situación a la que plantean los choferes del transporte público, no les interesa los usuarios, ellos pueden hacer lo que les dé la gana, convirtiéndose en “sociedades y grupos supuestamente independientes” dentro de la comunidad paceña “no quieren ser multados, menos controlados, aun peor que se les diga algo”, razón que los ciudadanos paceños sugieren que desaparezcan los sindicalizados.

Como existen diferentes líneas de minibuses, es casi lo mismo con las empresas telefónicas y electricidad que de manera indiscriminada extienden sus cables por toda la ciudad para prestar sus servicios; por ejemplo televisión por cable, telefonía móvil y local, Cotel, compañías de internet y electricidad que deberían dar ejemplo de una instalación. También quienes construyen su casa arrastran electricidad de los postes, sin ninguna previsión y menos seguridad para su familia, se pueden observar instalaciones improvisadas en los barrios de la ciudad. A estas empresas no les interesa la seguridad de los ciudadanos, es instalar como sea y donde sea, colocando una abrazadera o alambres de amarre.

A esto hay que sumar que los postes de luz o de otros se han convertido en apoyadores directos de vallas publicitarias que van de poste a poste y son colocados con alambres que se quedan como parte del decorativo de los postes.

POR TIERRA

El asunto no queda ahí, esto es por el aire y por tierra, ni se le ocurra ir por la calle Apumalla, porque al caminar por la vereda o acera se encuentra con una serie de cables de alta tensión de soldadura electrónica y en cualquier momento podría ser electrocutado o finalmente resbalar por pisar el cable. Pero no es en el único lugar, existen otros en la ciudad.

Un mal hábito de algunos ciudadanos, que ocupan la aceras de la calle como parte de sus instalaciones de trabajo, efectivamente no es delito que trabajen, pero tendrán que hacerlo dentro sus instalaciones, tiene que haber un límite.

Otro tanto es de los comerciantes que copan las aceras de calles y avenidas, como si fuesen dueños y al final los ciudadanos tienen que caminar por las vías, esquivando a los vehículos. No debería ser necesaria la intervención del municipio por el contrario se refiere a la conciencia de la gente que se dedica a perjudicar a otras, deberían evitar esta situación, pero al parecer estamos muy lejos de respetarnos entre habitantes.